Martha Sánchez Hechavarría es una de las mujeres calixteñas protagonista del paso de la Caravana de la Libertad por el poblado de Buenaventura en 1959.
Narra ese acontecimiento como si hubiera ocurrido hace unos instantes: “Figúrate, era un mar de pueblo, la caravana no paró en este poblado pero los rebeldes montados en los camiones nos lanzaban sus collares. Nosotros estábamos en el barrio de Jagüeyes y nos avisaron que nos iban a quemar la casa, te cuento que mi madre bordaba los brazaletes del 26 de Julio, imagínate la complicidad. Regresamos inmediatamente a Buenaventura, donde el órgano de los Hermanos Ajo era el principal protagonista de la libertad aquí, no paraba de tocar y ahí nos enteramos de que Fidel iba a pasar por aquí en camiones, tanques. Era tanta la emoción que varias personas de mi familia se trasladaron rápidamente a las cercanía de la carretera para presenciar lo que constituía un acontecimiento”.
“Yo solo contaba con trece años y recuerdo con nitidez lo que ocurrió ese día de enero de 1959 - y prosigue- “nos enteramos de que el día tres habían estado en Holguín y pasaron la jornada allí, entonces el cuatro nos levantamos bien tempranito, nos paramos en la parte más elevada de un solar yermo, y aunque la caravana no se detuvo algunos camiones se estacionaron en la bomba de gasolina y recuerdo que una amiga Flor María Pérez fue más resuelta, se acercó y su presencia fue reflejada posteriormente en una foto que la vi pero no nos quedamos con ella”.
“Era tanta la alegría, el saber que había triunfado la Revolución y que Fidel iba en esa caravana. Guardo con mucho placer uno de esos collares rústicos ya está viejito, entregado en esa ocasión por los rebeldes, lo mantengo y cada vez que lo reviso se me deshace porque está hecho con hilo de coser sabe dios cuanto trabajo pasó el soldado rebelde para ensartar las semillas de santa Juana , Ojo de Buey; son muchos los años, y aunque quisiera donarlo al museo municipal me da lástima porque es un recuerdo de ese momento glorioso, un símbolo que confirma que por Buenaventura pasó Fidel Castro con su caravana de la Libertad” , confiesa esta querida y respetada maestra ya jubilada, protagonista de un suceso revolucionario que emocionó a este poblado oriental el cuatro de enero de mil 959.
“Déjame decirte que aquí escasamente hubo radios, nada de televisión ni teléfono y al enterarnos de que Fidel estaba en Holguín comenzaron las fiestas desde el tres y hasta el cuatro de enero, porque muchas personas que nos fuimos el primero y el dos para el campo no sabíamos qué es lo que había pasado en el país.
Cuando le pregunto a Marta sobre el significado de haber sido protagonista entonces del paso de la caravana por el holguinero poblado de Buenaventura, me responde con la humildad que le caracteriza, “mira no solamente para mí, todos los que teníamos entonces entre trece y catorce años fuimos iniciadores de todo, las Milicias Nacionales Revolucionarias, la Federación de Mujeres Cubanas, los CDR, fuimos alfabetizadores, fuimos de todo, ese honor es de todo un pueblo”, puntualiza esta calixteña protagonista en mil 959 del paso de la Caravana de la libertad por el poblado de Buenaventura.