Marcia Fidalgo López es de esas profesionales de la enfermería en el holguinero municipio de Calixto García que sobresalen por la dedicación y entrega con que asumen la profesión.
Es precisa, con pleno dominio y más que todo con probadas habilidades en cada uno de los procederes desempeñados.
Así pudo comprobar esta reportera en una de su más reciente visita al Consejo popular de San Agustín de Aguarás en la que su maestría puso a prueba la experiencia de más de una treintena de años entre la vida y la muerte.
Y aunque es de las que prefiere hacer más que hablar me dijo: “Laborar en los servicios de urgencias médicas me apasiona, pues salvar vidas es nuestra razón de ser y aquí es casi siempre donde estamos en ese desafío constante cuando acuden pacientes con convulsiones, crisis de asma, presión alta y Sí me gusta y me siento útil”.
Sin embargo sus más de 34 años de labor la han convertido en una profesional de excelencia a toda prueba. ”Mis inicios fueron en la hermana provincia de Las Tunas nada más que en cuidados intensivos de Neonatología, una experiencia maravilloso, aportadora y de mucha sensibilidad, luego me trasladé hacia mi pueblo y he servido a él en varias labores como Asesora del Programa Materno Infantil (Pami), en consultorios médicos, y en el cuerpo de guardia, actual desempeño que disfruto.”
Como todo profesional de la salud cubana su vocación solidaria no ha sido una excepción de crecimiento profesional. “En Venezuela tuve una experiencia muy linda como enfermera intensivista en Barquisimeto, estado de Lara, donde pude compartir saberes y aprender también, pues cada día es un nuevo aprendizaje y todos tenemos que aportar y de eso se trata esta profesión”. “Feliz de lo logrado y lo que aún falta porque llevo la profesión en mi corazón”.
Por eso en su puesto o simplemente fuera de él, comparte con orgullo una de las profesiones más altruistas y respetadas a las que siempre tendremos que elogiar.
