
La lucha por la equidad y la justicia es un asunto que nos compete a todos. Eso lo aprendimos de nuestro líder histórico Fidel Casto Ruz, este constituyó el eje central de su acción revolucionaria, para Cuba y para el resto de las naciones que ama y defienden la paz.
El líder histórico de la Revolución Cubana, Fidel Castro Ruz, se destacó a lo largo de su vida por ser un ferviente defensor del multilateralismo y un incansable promotor de la paz mundial.
Recordemos su discurso en la Asamblea General de la ONU, el 26 de septiembre de 1960, en el que denunció con vehemencia las prácticas neocoloniales, el dominio económico ejercido por las grandes potencias y las injusticias sufridas por los países en desarrollo.
En una intervención que se extendió por más de cuatro horas, advirtió que la verdadera paz solo sería alcanzable si se erradicaba la filosofía del despojo, la guerra y la explotación.
«¡Desaparezca la filosofía del despojo, y habrá desaparecido la filosofía de la guerra! ¡Desaparezcan las colonias, desaparezca la explotación de los países por los monopolios, y entonces la humanidad habrá alcanzado una verdadera etapa de progreso!», enfatizó Fidel.
En el discurso de clausura de la reunión de la presidencia del Consejo Mundial de la Paz, el 21 de abril de 1981, en La Habana, afirmó que, «si no hay desarrollo y un mínimo de justicia para los pueblos, tampoco habrá paz».Así lo reiteró dos años después: «La lucha por la paz es la lucha por la supervivencia de la humanidad.
Por eso los cubanos defendemos y apoyamos a "Venezuela y a todos los pueblos del Caribe y Suramérica, porque tenemos derecho a la Paz con soberanía, igualdad y libertad.
Los cubanos aprendimos de Fidel que defender la paz se trata de un compromiso activo para salvar a la humanidad, proteger a los pueblos y construir un orden internacional de equidad y cooperación.




