Ni la pertinaz llovizna, ni el frío pudieron detener a los calixteños a celebrar, como ya es tradición con el asado de los cerdos, el aniversario 65 del triunfo de la Revolución cubana, y convertir la jornada del primero de enero en una gran fiesta de pueblo, a lo cubano, a lo calixteño, llena de colorido y alegría.
Fotos de Artemio Leyva Los hombres y mujeres del campo se trasladaron hasta Buenaventura, poblado cabecera del municipio, para convertir la plaza central y sus áreas aledañas en un acontecimiento. No importa si había árboles, donde algunos se guarecían, o toldos inventados para no mojarse , o simplemente tenían el cielo por cobija, allí los veías en grupos, los campesinos con sus familias, sonrientes y alegres, dando la vuelta a la vara donde asaban el cerdo.
Hasta la plaza central llegaron campesinos de todas las organizaciones campesinas del territorio, a las que se sumaron las empresas Agroindustrial jíquima, Comercio y Gastronomía, la Pecuaria Calixto García, y otros actores económicos del municipio con las ofertas para la población.
No faltaron los acordes del Órgano Oriental “Hermanos Ajo”, nuestra principal tradición cultural desde bien temprano aderezando la fiesta, hasta cerrar la jornada con la buena música cubana para los bailadores. Una vez más se demostró que Sí se puede. La celebración del nuevo aniversario de la Revolución se convirtió en una gran fiesta de pueblo.