El vice primer ministro y titular de Comercio Exterior de Cuba, Ricardo Cabrisas, confirmó hoy aquí que las relaciones económico-comerciales entre la nación caribeña y Rusia son estratégicas.
En la plenaria de la XXI sesión de la Comisión Intergubernamental Cubano-Rusa de Colaboración Económico-Comercial y Científico-Técnica, el dirigente antillano afirmó que los vínculos entre La Habana y Moscú han experimentado un creciente fortalecimiento en los últimos años.
Al respecto, precisó que el 2023 constituyó un parte aguas en los métodos de trabajo conjunto, y fue el punto de inflexión para el inicio de la participación efectiva del empresariado ruso en el Plan Nacional de Desarrollo Económico y Social de Cuba hasta el 2030, sobre bases mutuamente ventajosas.
No obstante, Cabrisas enfatizó que los logros alcanzados hasta la fecha no pueden ser motivo de satisfacción absoluta. “Necesitamos pasar a la concreción de resultados, a partir de las necesidades latentes de nuestros países y visiones compartidas de desarrollo”.
Asimismo, el copresidente de la Comisión Intergubernamental por Cuba agradeció el apoyo brindado por las autoridades del gigante euroasiático mediante el suministro de hidrocarburos, trigo y fertilizantes, en medio de un complejo panorama económico y financiero en la isla.
En ese sentido, el ministro de Comercio Exterior explicó que la mayor de las Antillas enfrenta en la actualidad una situación de “economía de guerra”, como consecuencia “de la guerra económica no declarada a Cuba por el Gobierno de los Estados Unidos de América”.
Cabrisas argumentó que a ello se suma la situación del panorama geopolítico y económico actual a escala global, marcado por los rezagos de la pandemia de la Covid-19, así como los diferendos comerciales y conflictos bélicos que flagelan principios básicos de la humanidad.
Al respecto, ratificó que el Gobierno y pueblo cubanos mantienen una postura firme contra las sanciones unilaterales de Occidente contra Rusia, y condenan sus intentos de aislar a Moscú en los organismos internacionales.
Por otra parte, el vice primer ministro acentuó la voluntad de Cuba de honrar sus compromisos externos, teniendo claridad que para alcanzar esta meta debe revertir la situación económica.
Como mecanismo para dar un paso de avance en esa dirección, Cabrisas instó al crecimiento de la inversión del empresariado ruso en sectores claves como la agricultura, transporte, energía, comunicaciones, salud, entre otras.
En esa línea, destacó el avance en el área del turismo, donde la nación eslava ostenta hoy el tercer puesto como país emisor de turistas a los polos de la industria del ocio antillana.
Cabrisas insistió a los presentes en el plenario que la solidez de las relaciones ruso-cubanas radica en el compromiso de ambos Gobiernos y pueblos en construir un camino hacia la prosperidad mutua.
Al cierre del encuentro el titular cubano junto a su homólogo ruso Dmitri Chernyshenko firmaron el documento final que guiará el trabajo en lo adelante en aras de continuar avanzando en la concreción de resultados hasta el próximo encuentro pautado para el primer trimestre de 2025 en La Habana.
