Si me preguntaran la mayor virtud que tiene la naturaleza, no dudaría en decir: la magia de crear, cambiar o destruir el medio ambiente. No transcurre un segundo en que no quedemos sorprendidos por alguna de sus travesuras.
Hoy les presentamos un imaginario pulpo de mar dentro de una mazorca de maíz, de la variedad tayuyo.
La curiosa espiga fue cultivada por el campesino Raúl Reyes Saragoza, miembro de la Cooperativa de Créditos y Servicios Wilfredo Peña Cabrera, de Mir.
El maíz, cereal altamente codicio en el mundo, es uno de los cultivos mas arraigados en la cultura del cubano, debido, entre otras cosas, a su utilización como alimento animal, y a la gran variedad de recetas que se elaboran a partir de sus derivados.
La curiosa mazorca, recogida en la finca de Raúl ha sido tema de comentario, que ha pasado de boca en boca, como otra más de las travesuras de la “madre natura”.